¿ETERNAMENTE TARADOS?
Desde tiempos inmemoriales
la especie humana es una consuetudinaria
consumidora de drogas
de todo tipo,
aunque las más peligrosas
son los conceptos perniciosos que utiliza,
a través de los
cuales imagina el futuro,
lacrando con ellos a
los hijos de sus hijos, y así sucesivamente,
hasta el punto que
todos nacen convencidos de ellos y de sus bondades,
reconstruyendo las
sociedades sobre los escombros que van quedando por su proceder.
En el próximo porvenir,
los seres que dominaran al cosmos,
serán los que no
tengan como taras esas metas,
ya que el tiempo son multidimensiones
sin direcciones ni formas,
condensadas dentro
del espacio comprimido por fuerzas desproporcionadas,
desbalanceas y
desconsideradas, a las cuales nada puede afectar ni definir,
apenas van escalando entre
el universo por medio de fundamentos sin conceptos,
así que sólo se podrá
utilizar su potencia a raíz de una única manera,
la fuerza que brota espontánea
y exponencialmente al existir,
moldeando con ella
cualquier tipo de masa, a partir de unas series de energías oscuras,
ocultas hasta ahora
para la única especie dopada por sus teorías,
creyendo dominar el
escenario universal, donde aquellas no tienen cabida.
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