TEMBLORES O ESCARCEOS DE UN MAL

TEMBLORES O ESCARCEOS DE UN MAL

A cada rato tiembla en la Tierra, y estos fuertes movimientos no son simples temblores de vulcanicidad.

Son producto de sus reacciones naturales, porque en cualquier lugar de sus tierras le han estado naciendo otros seres humanos con algún otro mal.

Al mismo tiempo, y por todos lados, caen rayos y centellas con sonidos tan estridentes que destemplan los dientes.

Muchos seres, en su soledad, comentan que éstos son los intentos de anunciar, como buenas nuevas, los males permanentes para toda la humanidad.

Sin embargo, todos en el mundo lo saben también, y es que esos escarceos y sonidos se originan, y circunscriben, en los intentos desesperados de una pequeña parte de la sociedad.

Quienes inhumanamente hacen todo lo posible por hacer visible su egoísmo y voracidad, al querer hacerse con el resto de la humanidad, al precio y costo que sea, así sea con su propio final.
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