DESPRECIANDO
A LA VIDA
Languidecen las horas de todos, todos los días, mientras
que el tiempo,
de improviso, en su eterno recorrido, se detiene en la piel de la tierra,
porque ha descubierto que ésta ahora gira en el sentido contrario a la vida,
aún sabiendo que, en el espacio vacío, nunca se dio.
de improviso, en su eterno recorrido, se detiene en la piel de la tierra,
porque ha descubierto que ésta ahora gira en el sentido contrario a la vida,
aún sabiendo que, en el espacio vacío, nunca se dio.
Entre tanto, en la oscuridad de nuestras mentes,
es cuando toman sentido las emociones humanas,
aquellas que andan desbocadas a la luz de los sucesos continuos con los que venimos, como humanidad y a diario, destrozando esa piel,
pues hemos encontrado en el amor al dinero más motivos que en el amor propio,
por eso hoy hasta una simple caricia tiene un precio, que sumando el de todos,
conduce al desprecio que le estamos dando a la esencia de la vida.
es cuando toman sentido las emociones humanas,
aquellas que andan desbocadas a la luz de los sucesos continuos con los que venimos, como humanidad y a diario, destrozando esa piel,
pues hemos encontrado en el amor al dinero más motivos que en el amor propio,
por eso hoy hasta una simple caricia tiene un precio, que sumando el de todos,
conduce al desprecio que le estamos dando a la esencia de la vida.
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