HACIÉNDOLE EL JUEGO A LOS CORRUPTOS

!HACIÉNDOLE EL JUEGO A LOS CORRUPTOS¡

A raíz de la posible disminución de impuestos en los municipios de Colombia, por motivo de unos cambios en la liquidación de la sobre tasa a la gasolina, se ha notado una posición bastante laxa de toda la sociedad al respecto, aunque debo aclarar que siempre ha sido así, con muy contadas excepciones; y con los medios de comunicación  a la cabeza, a favor de los gobernantes y su absurda forma de buscar recursos, donde queda latente el mensaje que solo crear impuestos es la única alternativa para obtenerlos, como igual ha sido la solución contra el delito, donde siempre la solución aquí ha sido encerrar en vez de educar; nos fascina el alboroto inmediato y no la solución definitiva, de lo cual siempre se han aprovechado, pues esto representa una solución fácil para los administradores de los recursos públicos y muy en contra del ciudadano del común, quienes hoy solo pareciéramos ser, para los gobernantes, un botín del que se pueden aprovechar cuantas veces quieran, y que con esta actitud estatal, generada y promovida a través de los gobiernos de turno, están provocando que las mayorías veamos menguados nuestros ingresos cada año que pasa.                                                                                                                     

Los ciudadanos nos encontramos desamparados con este tipo de análisis, pues sentimos que todos los elementos de la sociedad de consumo están en nuestra contra, y mucho más cuando la prensa libre cae en el juego y avala estas salidas facilistas de quienes nos gobiernan. 

Siendo testigos, todos, a diario, del desenfreno y de la irresponsabilidad con que se manejan los recursos públicos, crear impuestos debería ser la última opción de las posibles soluciones.

¿Por qué no se habla de mejorar los controles para evitar el robo continuado del erario?, ¿por qué no se exigen mejores métodos de administración pública?, ¿por qué no se menciona reducir el tamaño del Estado, al que cada gobierno de turno reforma a su amaño y gusto? ¿por qué no se le imponen a los que más ganan que paguen más que los demás?, ¿por qué aceptamos que el que menos gana sea proporcionalmente el que más aporte?, ¿Por qué no tomamos la responsabilidad que nos concierne a cada uno y la ponemos al servicio general?, ¿Por qué no hemos podido entender que no son teorías políticas o filosóficas las que nos deben importar, son los resultados de esos gobiernos y que tenemos que velar por los que vienen atrás?

Podría seguir haciendo preguntas, que en realidad nadie me va a responder, porque al final de cuentas los ciudadanos no tenemos dolientes diferentes a nosotros mismos, pero que, ante la creencia popular de que es mejor no votar por estos picaros que nos gobiernan, estamos permitiendo el asalto permanente a nuestros menguados ingresos, siendo testigos indolentes, viendo impávidos que los recursos que se ganan con el sudor del esfuerzo personal ahora solo alcanzan para pagar los impuestos que a cada rato se inventan, dizque nuestros representantes, para el funcionamiento óptimo del Estado, pero que terminan robándoselos y malversándolos, mientras que los demás debemos sobrevivir comiendo aire raspado, viento molido y conformarnos con las esperanzas congeladas.

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