EN LAS SUMAS Y RESTAS DE UN DESAMOR UNO MAS UNO NO SIEMPRE ES DOS

EN LAS SUMAS Y RESTAS DE UN DESAMOR UNO MAS UNO NO SIEMPRE ES DOS

Puede haber tanto de mí en ti, como lo mucho o lo poco que de ti hay en mí,

ya que ambos hemos sido almas gemelas y complementarias,

de lo mucho que nos odiamos y de lo poco que nos amamos,

así que hemos ido tirando por los suelos

los restos de todo el cariño que nos brindábamos

para pisotearlos después en los lechos donde nos maltratábamos,

creyendo seguir los rastros de unas pasiones agonizantes

por los senderos donde creíamos caminar juntos,

pero dejando por ellos uno regueros, del desamor,

aquel hijo bastardo de nuestro mal amor.

Con el pasar del tiempo, el dolor de odiarnos se incrementó,

igual el pesar que sentíamos por el rencor,

pesando tanto en nuestros corazones, que las razones de amarnos

se fueron difuminando con las ilusiones perdidas que teníamos los dos,

por ver algún día volver a sentir ese cariño,

el que sentimos cuando creíamos ser uno por amor.

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