UN JUEGO DE VANIDADES ENTRE SUS
DUEÑOS
Los dueños de todo,
pero responsables de nada,
imponen con violencia
y terror su voluntad contra todos los demás,
lo hacen con tanta
facilidad que parece mentira lo que alcanzan a lograr
sobre un mundo material
que simula ser artificial,
donde la realidad es simple
reflejo de un juego de vanidades,
las cuales van y están
detrás del poder terrenal, aunque con él se deshaga la humanidad.
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