SOCIEDADES PROCLIVES AL DECLIVE
La idea de bienestar personal, aunque parece una expresión insustancial y despojada de peligrosidad, en realidad está fundamentada en la adquisición y acumulación material, siendo un germen que una vez insuflado en las almas humanas hace crecer exponencial y desaforadamente las ansias de riquezas individuales, que después producen y procesan sociedades en declives permanentes porque están proclives a pisotear derechos y cuerpos ajenos.
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