SOCIEDADES CONFIADAS SON FÁCILES DE ENGAÑAR

SOCIEDADES CONFIADAS SON FÁCILES DE ENGAÑAR

Cualquier país, con dirigentes disfrazándose de seres bondadosos, preocupados y ecuánimes, está predispuesto a transformar su particular realidad en una escena camuflada e ideal para el montaje de engaños hacia los miembros de unas sociedades siempre prestas a caer en las trampas que le elaboran a todo momento, por resultar ser tan inocentes y confiadas en hipotéticos personajes expertos pero por aviesos, al conocerles sin esfuerzo sus comportamientos reiterativos de indolentes e indiferentes con el futuro que les tienen éstos preparado.

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