ES EL SILENCIO EL QUE NOS ATA A UNA REALIDAD QUE MATA
Somos como individuos los silenciosos testigos del desmoronamiento de un mundo que tanto le conviene a los criminales de criaturas que vimos implorando justo antes de morir, nada justifica nuestra condición de menesterosos mendigantes de acciones diferentes frente al terrible escenario que estamos ayudando cronológicamente a construir, es menester asumir con convicción que es el temor que nos afecta e inmoviliza la autorización buscada por los antisociales que nos dominan sin tener que recurrir ni requerir confrontarnos ni enfrentarnos en las luchas que debemos como especie afrontar y contraer.
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